Las empresas en Europa tienen que establecer un sistema que cumpla con las reglas descritas en la Norma "EN 1090 - Requisitos para la evaluación de la conformidad de los componentes estructurales", que es obligatoria desde el 1 de julio de 2014. Estas reglas dependen del tipo de construcciones, los materiales utilizados, el tipo de cargas a las que está sometida y la complejidad de fabricación del producto.

La implementación de esta norma está generando cambios económicos estructurales y en el crecimiento de la productividad industrial, que requiere una mano de obra altamente cualificada y adaptable, permitiendo a las empresas hacer frente a los desafíos económicos y sociales europeos para el futuro cercano.

SAT-EN 1090 cumple con la Estrategia Europea de Empleo (EEE), que pone de relieve el "importante papel de la educación y la formación profesional en una  economía basada en el conocimiento", ya que tiene como objetivo hacer frente a la demanda de la industria, mediante el desarrollo de un programa de formación armonizado en relación con la aplicación de la norma EN 1090. Por otra parte, a través del desarrollo de dicho resultado, SAT-EN 1090 tiene la intención de cubrir una creciente necesidad de mercado de profesionales cualificados especializados para garantizar el cumplimiento de las empresas con la norma EN 1090.

Los socios del consorcio, que están estrechamente relacionados con las industrias del metal, han identificado que más del 75% de las empresas no están preparados para implementar EN-1090. Teniendo en cuenta que el sector metalúrgico europea representa más de 87 millones de € de valor añadido para la economía europea, así como más de 2 millones de empleos, dicho incumplimiento da lugar a un impacto negativo grave en toda las empresas europeas.

El proyecto SAT-EN 1090 es especialmente relevante ya que está en línea con los objetivos de a la Unión Europea y del programa  Erasmus de impulsar la movilidad transfronteriza de los trabajadores cualificados Europea. Esto se logrará en base a la creación de un perfil europeo, a veces en contraste con las cualificaciones nacionales existentes, de conformidad con el Marco Europeo de Cualificaciones (MEC) y el enfoque de los denominado resultados del aprendizaje.

El objetivo del proyecto es evitar el incumplimiento de una serie de Normas Europeas, de carácter obligatorio, por parte de empresas que trabajen en el sector metal-mecánico. Esto se llevará a cabo a través del desarrollo de un currículo armonizado para el personal industrial involucrado en la implementación de la Norma EN 1090, centrándose no solo en las grandes empresas, sino también en las pymes de distintos países europeos. Este objetivo se alcanzara mediante la definición de materiales didácticos para la formación de personal involucrado en la implementación de la Norma EN 1090.

Esto conducirá a una armonización y unificación, a nivel europeo, de los métodos utilizados para implementar la norma de las empresas europeas involucradas en la fabricación de componentes de acero o de aluminio. Esta armonización dará lugar a una mejora de la movilidad en Europa de las personas proveniente de la formación profesional, inicial y continua, así como la mejora de la calidad de la educación y la formación en todo tipo de proveedores. Al final de este proyecto se espera 4 proveedores de formación profesional listos para el inicio de la formación en EN 1090. Esta formación no está disponible actualmente en los países involucrados, lo que supone una dificultad añadida en la implementación de la Norma EN 1090. Actualmente, los proveedores de formación no están preparados para ayudar a las empresas para el cumplimiento de la norma. Una encuesta realizada en la red de la EWF, que abarca 31 países, indicó que sólo el 10% de los países han comenzado los trabajos preparatorios para la formación relacionada con la aplicación de la norma EN 1090.